La Navidad es la época de mayor celebración familiar. Hermanos, padres, tíos, primos y abuelos se reúnen. Se intercambian regalos y abrazos, ¡y se comparte amor y mucha comida! Se habla de la escuela, el trabajo, la inflación y Ronaldo. ¡Lo de siempre!
Las fiestas navideñas traen consigo un aumento desmedido del consumo y la generación de residuos. Con el objetivo de minimizar el impacto ambiental, sin que ello afecte a esos momentos tan especiales en familia, aquí les presentamos tres consejos para una Navidad más sostenible.
Mantén las cortinas y persianas abiertas durante los periodos soleados.
¡Este sencillo gesto tiene muchas ventajas! En primer lugar, permite ahorrar energía. Al dejar las cortinas abiertas, entra más luz y se encienden menos luces, lo que significa que los rayos del sol calentarán el interior de la casa y ayudarán a ahorrar en calefacción. Tus plantas de interior también agradecerán la luz natural, a menudo escasa durante el invierno.
Recuerda que a las plantas no les gustan los radiadores ni las chimeneas encendidas. Mantenlas alejadas de las fuentes de calor.
Regala pensando en el medio ambiente.
Si quieres destacar, puedes regalar juguetes de madera u otros materiales reciclables —preferiblemente sin pilas— a los niños de tu casa. Tanto para niños como para adultos, las plantas de interior son un regalo estupendo, ya que contribuyen directamente a crear un ambiente más verde, ayudan a regular la humedad, purifican el aire y liberan oxígeno. ¡Sobre todo, son una forma de conectar con la naturaleza y fomentar el respeto por el medio ambiente!
¡Aquí va un consejo! El papel reciclado (y reciclable) que utilizamos para proteger nuestras plantas durante el envío es ideal para usarlo como papel de regalo.
Utiliza decoraciones naturales o sostenibles.
La mayoría de los adornos navideños son de plástico y no se pueden reciclar. Lo mismo ocurre con los árboles de Navidad artificiales, que suelen reemplazarse cada año, generando toneladas de residuos tóxicos. En cambio, los árboles naturales provienen principalmente de la tala de bosques o del cultivo. Mientras que los primeros se destruyen después de las fiestas, los árboles cultivados permanecen vivos y pueden conservarse al aire libre, en macetas o jardines, ¡o incluso replantarse en el bosque!
Para decorar tu árbol de Navidad, simplemente usa elementos naturales como rodajas de naranja o limón, ramas de canela, piñas o creaciones originales hechas por ti. No olvides que las plantas de interior tienen un gran componente decorativo durante todo el año, y la Navidad no es una excepción: ¡las plantas verdes y las flores rojas nunca pasan de moda!
Los grandes cambios comienzan con pequeñas acciones.
